La escuela Joánica en contra de la apostasía

Pastor José David Tax:

Jacobo, Cefas y Juan que eran considerados columnas de la Iglesia. «Y reconociendo la gracia que me había sido dada, Jacobo, Cefas y Juan que eran considerados columnas, nos dieron a mí y a Bernabé la diestra en señal de compañerismo, para que nosotros fuésemos a los gentiles, y ellos a la circuncisión». Gálatas 2:9

Juan

El nombre de Juan viene del hebrero “Yohanan”, que significa: “Teniendo la gracia de Dios”, “Dios tiene mucha gracia” o “el Señor es misericordioso”. Era considerado el discípulo mas joven de los doce apóstoles del Señor Jesús (20 años de edad), se cree que nació en Betsaida en el año 6 d.C. Betsaida viene del hebreo/arameo y significa: “casa de la caza” o “casa de la pesca”.

Juan y Jacobo eran hermanos, hijos de Zebedeo y Salomé. Salomé estuvo en la muerte y resurrección de Jesucristo. «Cuando paso el día de reposo, María Magdalena, María la madre de Jacobo (Santiago),y Salomé, compraron especias aromáticas para ir a ungirle». Marcos 16:1

  • Jacobo fue el primer discípulo del Señor Jesús en morir como un mártir (Hechos 12:1-2).
  • Juan fue el único discípulo del Señor Jesús en llegar a la vejez y morir por causas naturales. Se cree que Juan llego al 101 d.C. teniendo 95 años, otros que creen que Juan pasó mas de los 100 años de edad.

«Volviéndose Pedro, vio que les seguía el discípulo a quien amaba Jesús, el mismo que en la cena se había recostado de lado de el, y le había dicho: Señor, ¿Quién es el que te ha de entregar?». Juan 13:21-30

«Cuando Pedro le vio, dijo a Jesús: Señor, ¿y que de este? Jesús le dijo: si quiero que el quede hasta que yo venga, ¿Qué a ti? Sígueme tu. Este dicho se extendió entonces entre los hermanos, que aquel discípulo no moriría. Pero Jesús no le dijo que no moriría, sino: si quiero que el este hasta que yo venga, ¿Qué a ti?». Juan 21:21-23

¿Quienes fueron los 2 discípulos de Juan el Bautista que también fueron discípulos del Señor Jesús?

  1. Simón: Pedro.
  2. Andres (Discípulo de Juan el Bautista).
  3. Jacobo.
  4. Juan (Discípulo de Juan el Bautista).

«El siguiente día otra vez estaba Juan (Juan el Bautista), y dos de sus discípulos. Y mirando a Jesús que andaba por allí, dijo: He aquí el cordero de Dios. Le oyeron hablar los discípulos, y siguieron a Jesús. Y volviéndose Jesús, y viendo que le seguían, les dijo: ¿Qué buscáis? Ellos le dijeron: Rabí (que traducido es maestro) ¿Dónde moras?». Juan 1:35-42

El carácter de Juan.

Jacobo y Juan eran conocidos como los hijos del trueno, se enojaban muy fácilmente. En una ocasión una ciudad no quiso recibirles, y ellos le dijeron a Jesús: «Señor, ¿quieres que mandemos que descienda fuego del cielo, como hizo Elías, y los consuma?». Marcos 3:17 (2 Reyes 1).

«Entonces volviéndose el, los reprendió diciendo: Vosotros no sabéis de que espíritu sois; por que el Hijo del Hombre no ha venido para perder las almas de los hombres, si no para salvarlas. Y se fueron a otra aldea». Lucas 9:55-56 «Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él». Juan 3:16-17

Otro caso lo tenemos cuando Juan reprende a un hombre que estaba echando fuera demonios en el nombre de Jesús. «Juan le respondió diciendo: Maestro, hemos visto a uno que en tu nombre echaba fuera demonios, pero él no nos sigue; y se lo prohibimos, por que no nos seguía». Marcos 9:38-41

La petición de Salomé a Jesús en cuanto a sus hijos Jacobo/Santiago y Juan, que mis hijos se sienten en tu reino uno a la derecha y el otro a la izquierda.

«Cuando los diez oyeron esto, se enojaron contra los dos hermanos. Jesús les dijo: Sabéis que los gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y los que son grandes ejercen sobre ellas potestad. Mas entre nosotros no será así, si no el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor, y el que quiera ser el primero entre vosotros será vuestro siervo; como el Hijo del Hombre no vino para ser servido, si no para servir y para dar su vida en recate por muchos». Mateo 20:24-28

Juan fue parte de círculo íntimo de Jesús junto con su hermano Jacobo y Pedro.

  1. La transfiguración de Jesús con Moisés y Elías en el monte Hermón (Mateo 17:1-13, Marcos 9:2-13, Lucas 9:28-36, 2 Pedro 1:16-21).
  2. La resurrección de la hija de Jairo (Mateo 9:18-19, 23-26, Marcos 5:21-24, 35-43, Lucas 8:40-42, 49-56).
  3. La oración de Jesús en el Huerto de Getsemaní (Mateo 26:36-46, Marcos 14:32-42, Lucas 22:39-46, Juan 18:1).

El primer milagro de Jesús:

Transformó el agua en vino en las bodas de Caná, se cree que era la boda del Apóstol Juan. Juan te da muchos detalles de esta boda.

Se hicieron unas bodas en Caná de Galilea, estaba allí la madre de Jesús (la familia). Jesús y sus discípulos estaban entre sus invitados (Juan 2:1-2).

El Apóstol Juan fue transformado, Juan se menciona así mismo en el Evangelio de Juan 5 veces como: “el discípulo a quien Jesús amaba”, “el que estaba recostado al lado de Jesús” (Juan 13:23-27, 19:26-27, 20:2–10, 21:7, 21:20-23).

La dupla de Pedro y Juan.

  • Fueron enviados a preparar la Santa Cena del Señor (Lucas 22:7-13).
  • Tal vez, también fueron los 2 discípulos enviados por Jesús para ir por su pollino nuevo para la entrada triunfal en Jerusalén (Lucas 19:28-38).
  • Pedro le hizo señas a Juan para que le preguntase a Jesús a cerca de quien lo iba a traicionar (Juan 13:23-27).
  • En la resurrección de Jesús los 2 corrieron al sepulcro (Juan 20:1-10).
  • En el milagro de los 153 peces estaban 7 discípulos de Jesús, entre ellos Pedro y Juan. Es Juan quien le dice a Pedro: ¡Es el Señor! (Juan 21:1-14).
  • Fue Pedro quien le preguntó acerca de Juan al decir: “Señor, ¿y que de esté? (Juan 21:20-25).
  • La curación del cojo en la puerta “la hermosa” en el templo de Jerusalén (Hechos 3, 4 y 5).

Los libros que escribió el Apóstol Juan.

  • 85-95 d.C – Las 3 cartas de Juan en Éfeso.
  • 95-97 d.C – El libro de Apocalipsis en Patmos.
  • 97-101 d.C – El Evangelio de Juan en Éfeso.

Juan estableció su ministerio, donde primero escribió 3 cartas. De acuerdo con el escritor Tertuliano (160-220 d.C.) asentó que Juan fue arrestado por órdenes del emperador romano Domiciano y llevado a Roma.

Donde trataron de martirizarlo, poniéndolo encadenado en una caldera de aceite hirviendo en las cercanías de la Puerta latina en los muros aurelianos, aproximadamente entre los años 91 y 95 d.C. donde Juan salió totalmente ileso. Luego los de la multitud que se congregó en el Coliseo aceptaron a Jesucristo al ver que a Juan no le había pasado nada.

«Cuando Pedro le vio, dijo a Jesús: Señor, ¿y qué de éste? Jesús le dijo: Si quiero que él quede hasta que yo venga, ¿qué a ti? Sígueme tú. Este dicho se extendió entonces entre los hermanos, que aquel discípulo no moriría. Pero Jesús no le dijo que no moriría, sino: Si quiero que él quede hasta que yo venga, ¿qué a ti?». Juan 21:21-23

El emperador Domiciano (81-96 d.C.) lo consideró como una especie de magia y no volvió a intentar otra clase de ejecución y mandó a desterrar a Juan a la isla de Patmos. Domiciano se llamaba a sí mismo: señor y dios.

Emperadores en el tiempo del Apóstol Juan

Dinastía Julio – Claudia.

  1. Augusto (27 a. C. – 14 d. C.).
  2. Tiberio (14 – 37 d. C.).
  3. Calígula (37 – 41 d. C.).
  4. Claudio (41 – 54 d. C.).
  5. Nerón (54 d. C – 68 d. C.).

Dinastía Flavia.

  1. Vespasiano (69 – 79 d.C.).
  2. Tito (79 – 81 d. C.).
  3. Domiciano (81 – 96 d. C.).

Dinastía Antonina.

  1. Nerva (96 – 98 d. C.).
  2. Trajano (98 – 117 d. C).

Las 10 grandes persecuciones romanas contra el cristianismo en los primeros 4 siglos de la iglesia.

  1. Nerón (64 – 68 d.C.).
  2. Domiciano (81 – 96 d.C.).
  3. Trajano (109 – 111 d.C.).
  4. Marco Aurelio (161 – 180 d.C.).
  5. Séptimo Severo (202 – 210 d. C.).
  6. Maximino (235 d. C.).
  7. Decio (249 – 251 d. C.).
  8. Valeriano (256 – 259 d. C.).
  9. Aureliano (270 – 275 d. C.).
  10. Diocleciano (303 – 313 d. C.).

La iglesia de Éfeso

Apolos predica en Éfeso (Hechos 18:24-28).

  • 24 Un judío de Alejandría.
  • 25 Enseñaba diligentemente aunque solo conocía el bautismo de Juan el Bautista.
  • 26 Priscila y Aquila lo adiestraron.
  • 27–28 Demostró por las Escrituras que Jesús era el Cristo.

Pablo en Éfeso (Hechos 19).

  • ¿Recibisteis el Espíritu Santo cuando creísteis?
  • Los ancianos de Éfeso fueron a Mileto en la despedida del Apóstol Pablo (Hechos 20:13-38).
  • El apóstol Pablo batalló en Éfeso contra fieras (1 Corintios 15:32).
  • Estuvo en Éfeso hasta Pentecostés (1 Corintios 16:8).
  • A los santos que están en Éfeso (Efesios 1:12).
  • Timoteo pastor de Éfeso (1 Timoteo 1:3).
  • Onesíforo de Éfeso (2 Timoteo 1:16-18).
  • Tíquico fue enviado a Éfeso (2 Timoteo 4:12).
  • Priscila, Aquila y Onesíforo de Éfeso (2 Timoteo 4:19).
  • Mensaje a la iglesia de Éfeso (Apocalipsis 1:11; 2:1-17).

Regresó a Éfeso y escribiría su ultima obra: El Evangelio de Juan, el ultimo libro en escribirse del Nuevo Testamento. Juan fue el último de los discípulos sobrevivientes del Señor Jesús y murió por causas naturales, se cree que paso los 100 años de edad, llegando al siglo II.

El gnosticismo

Doctrina filosófica y religiosa de los primeros siglos de la iglesia, mezcla de la cristiana con creencias judaicas y orientales, que se dividió en varias sectas y propugnaba tener un conocimiento intuitivo y misterioso de las cosas divinas.

Viene de la palabra griega “gnosis” que significa “conocer”. Los gnósticos afirmaban poseer un conocimiento elevado, una verdad superior, adquirido no en la Biblia, sino en el misticismo.

El gnostismo enseñaba que la salvación se ganaba a través de la adquisición del conocimiento divino, el cual lo libera a uno de las ilusiones de las tinieblas. Aunque afirmaban seguir a Jesucristo tergiversaron la Biblia, contradiciéndola en todo momento.

Tertuliano de Cartago (160 – 220 d. C.)

“Todas las herejías en último término tienen su origen en la filosofía. De ella proceden los errores…”.

  • Filosofía: amor a la sabiduría (humana).
  • Apologética: hablar en defensa.

La Iglesia contra el gnosticismo

Jesucristo.

  • Mirad que nadie os engañe (Mateo 24:3–5, 21-26).
  • Lobos rapaces (Mateo 7:15-20).

El apóstol Pablo.

  • Lobos rapaces (Hechos 20:28-35).
  • Mirad que nadie os engañe (Colosenses 2:8-10).
  • Advertencia contra las falsas doctrinas (1 Timoteo 1:3-11).
  • Apostasía (1 Timoteo 4:1-5).
  • Las fábulas (2 Timoteo 4:1-5).
  • He terminado la gran Carrera (2 Timoteo 6-8).

El apóstol Pablo y el gnosticismo en 2 de Timoteo.

  • Figelo y Hermógenes (2 Timoteo 1:13-15).
  • Himeneo y Fileto (2 Timoteo 2:15-19).
  • Demas (2 Timoteo 4:10).
  • Alejandro el caldero (2 Timoteo 4:14).

El apóstol Pedro.

  • Falsos profetas y falsos maestros (2 Pedro 2).

El apóstol Juan.

  • El anticristo (1 Juan 2:18-29).
  • Probad los espíritus (1 Juan 4:1-6)
  • Muchos engañadores (2 Juan 7-11).
  • La oposición de Diótrefes (3 Juan 9-10).

El apóstol Santiago.

  • La sabiduría que viene de Dios (Santiago 1:2-11).
  • La sabiduría de lo alto (Santiago 3:13-18).

El apóstol Judás.

  • Falsas doctrinas y falsos maestros (Judas 3-16).

Apologética

Del griego: “hablar en defensa”. Pablo (Hechos 26:2, Filipenses 1:7, 17), Pedro (1 Pedro 3:15).

Apología: Discurso de palabra o por escrito en defensa o alabanza de alguien o algo.

Apologética: Conjunto de argumentos que se exponen en apoyo de la verdad de una religión.

Mártires en el Antiguo Testamento (Mateo 23:29-39).

  1. Abel (Génesis 4:8) por Caín.
  2. Zacarías (2 Crónicas 24: 17 – 22) por el rey Joás de Judá.

Mártires en el Nuevo Testamento.

  1. El diácono Esteban (Hechos 6:5, 8–15; 7).
  2. El apóstol Jacobo, hermano de Juan (Hechos 12:1-5).

Tres doctrinas de error (Judas 11-12).

  1. Caín – Asesinato (Génesis 4, 1 Juan 3:12).
  2. Balaam – Lucro (Génesis 4, 1 Juan 3:12).
  3. Coré – Contradicción (Números 16).

Nicolaítas: Comparación con Judas Iscariote (Mateo 10:1-4, Marcos 3:13-19, Lucas 6:12-16, Hechos 1:12-25 )

Tres casos de gnosticismo en la Biblia

1. La doctrina de Balaam (Números 22–24). La iglesia de Pérgamo (Apocalipsis 2:12-17).

  • Trono de Satanás.
  • La doctrina de Balaam.
  • La doctrina de los nicolaìtas.

2. La doctrina de los nicolaìtas.

  • Nicolás prosélito de Antioquía (Hechos 6:1-7).
  • Judas Iscariote (Mateo 10:1–4, Marcos 3:13–19, Lucas 6:12-16).

3. Simón el mago.

  • “El padre del gnosticismo” (Hechos 8:14-25).

Ireneo de Lyon: “Desde entonces creyó menos en Dios y, decidiendo competir por ambición con los apóstoles a fin de aparecer él mismo lleno de gloria, se puso a estudiar aún más la magia, a tal punto que llenaba de admiración a muchas personas”.

Vivió en los tiempos del emperador Cesar Claudio (41 – 54 d.C.), quien lo honró con una estatua por motivo de sus artes mágicas. Muchos lo glorificaban como a un dios, porque él así se hacía llamar.

“Simón el samaritano, del que se originaron todas las herejías, tuvo la teoría siguiente: Siempre llevaba como compañera en sus viajes a una prostituta llamada Elena, que había recogido en Tiro de Fenicia, diciendo que ella era el primer pensamiento de la mente, madre de todas las cosas, por las cuales el pensamiento habría decidido producir a los ángeles y arcángeles”.

La escuela de Juan en Éfeso

Otros gnósticos en el tiempo de la iglesia primitiva:

  • Marción de Sinope (85-160 d.C.).
  • Cerinto de Antioquía (50-100 d.C.).
  • Valentín el gnóstico (100-160 d.C.), estableció una escuela de gnósticos en Roma.
  • Basiledes (120-140 d.C.).
  • Corpócrates (138 d.C.).
  • Ebionitas (180 d.C.).
  • Cerdón (138-140 d.C.), seguidor de Simón el mago y fue   maestro de Marción.

Ignacio de Antioquía (35-110) 75 años. 

Fue un discípulo del Apóstol Juan, se convirtió en el primer mártir conocido, fuera del Nuevo Testamento, al ser asesinado por su fe, por los leones en el coliseo romano. Se negó a adorar a los dioses del imperio romano, fue arrestado por 10 soldados romanos. Iba a contribuir en los espectáculos que se preparaban en la fiesta en la que Roma celebraba su victoria contra los dacios.

Ignacio escribió 7 cartas, fue detenido, juzgado y condenado a morir en Roma:

“Temo vuestra bondad, que puede hacerme daño. Pues vosotros podéis hacer con facilidad lo que proyectáis; pero si vosotros no prestáis atención a lo que os pido me será muy difícil a mi alcanzar a Dios para que no solo me llame cristiano, si no que también me comporte como tal. Mi amor esta crucificado. No me gusta ya la comida corruptible, sino que quiero el Pan de Dios que es la carne de Jesucristo y su Sangre quiero beber, que es bebida imperecedera. Por que cuando yo sufra, seré libre en Jesucristo, y con él resucitaré en libertad. Soy trigo de Dios, y los dientes de las fieras han de molerme, para que pueda ser ofrecido como limpio pan de Cristo. Si nada decís acerca de mí, yo vendré a ser la Palabra de Dios. Pero si os dejáis convencer por el amor que tenéis hacia mi carne, volveré a ser una simple voz humana”.

Policarpo de Esmirna (69-155 d.C.; 86 años).

También fue un mártir cristiano del siglo II, fue discípulo de Juan, quien lo nombró presbítero de la iglesia de Esmirna. Vivió en la era más formativa de la iglesia cristiana, al final de la era de los apóstoles originales, cuando la iglesia estaba haciendo la transición a la segunda generación de creyentes.

Era muy amigo de Ignacio de Antioquía. También fue maestro de Ireneo de Lyon. Policarpo trató de resolver las disputas sobre la fecha para celebrar la pascua, y se enfrentó a uno de los herejes más problemáticos de la iglesia, Marciòn (85-160 d.C.) a quien llamaba “el primogénito de Satanás”. Logró convertir a muchos gnósticos para Cristo.

Escribió una carta pastoral a la iglesia de Filipos, muestra que tenía poca educación formal, que era modesto, humilde y derecho. Fue acusado y martirizado por negarse a adorar a los dioses romanos.
Después de orar supo que debía ir a la hoguera. El dijo: “hágase la voluntad de Dios”. En el juicio Policarpo le respondió al procónsul local, Estatio Quadratus:

“Mientras el fuego del procónsul dura solo un poco, el fuego del juicio reservado para los impíos no se podrá apagar. ¿Pero por qué te demoras? Ven, haz lo que quieras”. Quadratus le insistió maldecir a Cristo para ser libre. Policarpo le respondió: “Llevo 86 años sirviéndole, y ningún mal me han hecho. ¿Cómo he de maldecir a mi rey, que me salvó?”. Estando atado a la hoguera a punto de encender el fuego, Policarpo elevó su mirada al cielo y oró en voz alta:

“Señor Dios soberano te doy gracias, por que me has tenido por digno de este momento, para que, junto a tus mártires, yo pueda tener parte en la copa de Cristo. Por ello te bendigo y te glorifico. Amén”.

Ireneo de Lyon (130-202 d.C.; 72 años).

Se enfocó en confrontar y desenmascar al gnosticismo. Escribió sus reflexiones en una serie de 5 tratados, hoy conocidos como: “Contra las herejías”, un proyecto que desarrolló entre los años 175 y 189 d.C.. Uso abundantemente las escrituras para combatir el gnosticismo con 629 citas del Antiguo Testamento y 1065 del Nuevo Testamento.

Ireneo de Lyon: La verdadera gnosis (conocimiento) es la doctrina de los apóstoles, la antigua estructura de la iglesia en todo el mundo, y lo típico del cuerpo de Cristo, formado por la sucesión de los obispos a los cuales (los apóstoles) encomendaron las iglesias de cada lugar. Así nos llega sin ficción la custodia de las escrituras, en su totalidad, sin que se le quite o se le añada alguna cosa. Su lectura sin fraude, la exposición legitima y llena de afecto (por la palabra) según las mismas escrituras, sin peligro y sin blasfemia. Y sobre todo el don del amor, mas valioso que la gnosis (conocimiento), mas glorioso que la profecía y superior a todos los demás carismas.

Ireneo de Lyon menciona a Juan 15 veces en su obra. “Por fin Juan, el discípulo del Señor, que se había recostado sobre su pecho redactó el Evangelio cuando residía en Éfeso”. “Todos los presbíteros de Asia que, viviendo en torno a Juan, de él lo escucharon, puesto que este vivió con ellos hasta el tiempo de Trajano (98-117 d.C.).

En 200 años el mundo conocido fue alcanzado por el Evangelio de Cristo en el Imperio Romano

1ra Generación: El apóstol Juan (6-101 d.C.), a finales del Siglo I: Menos de 10,000 creyentes.

2da Generación: Policarpo de Esmirna (69-155 d.C.). A mediados del Siglo II (150 d.C.) alrededor de 40,000 creyentes (30,000 mas/3 veces).

3ra Generación: Ireneo de Lyon (130-202 d.C). Para principios del siglo III (200 d.C.) Mas de 200,000 creyentes (160,000 mas/ mas de 3 veces).

El mandamiento del Amor

«Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna». Juan 3:16

«Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros. En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros». Juan 13:34-35

«Si me amáis, guardad mis mandamientos». Juan 14:15

«Si guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor. Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido. Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado. Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos. Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer. No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé. Esto os mando: Que os améis unos a otros». Juan 15:10-17

«Y este es su mandamiento: Que creamos en el nombre de su Hijo Jesucristo, y nos amemos unos a otros como nos lo ha mandado. Y el que guarda sus mandamientos, permanece en Dios, y Dios en él. Y en esto sabemos que él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado». 1 Juan 3:23-24

«Y ahora te ruego, señora, no como escribiéndote un nuevo mandamiento, sino el que hemos tenido desde el principio, que nos amemos unos a otros». 2 Juan 5

«Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma». 3 Juan 2

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